Santas Anatolia y Victoria

10 de Julio


En Sabina, Lazio, santas Anatolia y Victoria, mártires.
Hay dos leyendas conectadas con estos mártires, que murieron durante la persecución de Decio. El “Martirologio de San Jerónimo”, hace de Anatolia una joven romana que fue denunciada junto a su hermana santa Victoria por sus pretendientes rechazados; las dos muchachas fueron encarceladas en Rieti donde sus milagros convirtieron a Audaz, uno de los guardias.

El Martirologio anterior a 1970, no nombra a Victoria y pone la escena del martirio en Tora, en la diócesis de Rieti, no lejos de una aldea llamada hoy Sant'Anatolia, por lo demás las dos historias concuerdan. Algún autor dice que murieron en Los Sabinjos en Italia.

La leyenda de Anatolia y Víctoria del 10 de Julio se sitúa en las afueras de Roma, en Tívoli, luchando contra un dragón al que vence. La leyenda es la siguiente: dos muchachas, Anatolia y Victoria, que tenían dos novios: Eugenio y Aureliano. Anatolia, muy rica, rompió su noviazgo con Aureliano, porque quiso consagrarse a Cristo. El novio habló con Victoria, para que convenciera a Anatolia, de casarse con él, pues él la quería a ella, y no a sus riquezas.

Victoria, habló con la muchacha y le dijo que existía un sacramento de la iglesia, que era el matrimonio, pero todo eso lo sabía Anatolia, quién terminó por convencer a Victoria, para hacerse también virgen consagrada, y romper su noviazgo con Eugenio. Los dos novios desilusionados y frustrados, las raptaron y las llevaron a un pueblo de la Sabina, donde las encerraron en la cárcel, y después de luchas con dragones, milagros fabulosos, ellos también se convirtieron. Luego vinieron las persecuciones de Decio, y las dos muchachas murieron mártires; a Victoria le atravesaron el corazón.