Imágenes de San Ramón Nonato
Biografía
31 de Agosto
San Ramón Nonato
Cardenal
Año 1240
San Ramón Nonato: te rogamos
por todos los católicos que tienen que sufrir
por defender nuestra santa religión.
Se le llama Nonato (no-nacido) porque nació después de morir su madre. Ella murió al dar a luz. Después de la muerte le hicieron cesárea para que el niño pudiera nacer.
Ramón significa: "protegido por la divinidad" (Ra=divinidad. Mon=protegido). San Ramón nació en Cataluña, España, en 1204. Muy joven entró en la Congregación de Padres Mercedarios que se dedicaban a rescatar cautivos que los mahometanos habían llevado presos a Argel. Lo recibió el mismo San Pedro Nolasco, fundador de la Comunidad.
Pocos años después de haber entrado de religioso fue enviado con una gran cantidad de dinero a rescatar a los católicos que estaban esclavizados por los musulmanes en Africa. Allá gastó todo el dinero en conseguir la libertad de muchos cristianos y enviarlos otra vez a su patria, de donde habían sido llevados secuestrados por los enemigos de nuestra religión.
Cuando se le acabó el dinero se ofreció el mismo a quedarse como esclavo, con tal de que libertaran a algunos católicos que estaban en grave peligro de perder su fe y su religión por causa de los atroces castigos que los mahometanos les infligían.
Como entre los musulmanes está absolutamente prohibido hablar de la religión católica, y Ramón se dedicó a instruir en la religión a sus compañeros de esclavitud y aun hasta a algunos mahometanos, le dieron terribles tormentos y lo azotaron muchas veces hasta dejarlo casi muerto. Y al fin, como no se callaba, le amarraron la cara a una correa a la cual le echaron candado, para que no pudiera hablar, y no abrían el candado sino cuando iba a comer.
El jefe musulmán, con la esperanza de que Ramón volviera a España y le llevara más dinero para rescatar cristianos, lo dejó en libertad. Pero se dedicó a hablar de nuestra religión a cuantas más personas podía. Esto hizo arder en cólera a los mahometanos y lo volvieron a encarcelar y a atormentar. Al fin San Pedro Nolasco envió a algunos de sus religiosos con una fuerte suma de dinero y pagaron su rescate y por orden de sus superiores volvió a España.
Como premio de tantos heroísmos, el sumo Pontífice Gregorio IX lo nombró Cardenal. Pero San Ramón siguió viviendo humildemente como si fuera un pobre e ignorado religioso.
El Santo Padre lo llamó a Roma para que le colaborara en la dirección de la Iglesia, y el humilde Cardenal emprendió el largo viaje a pie. Pero por el camino lo atacaron unas altísimas fiebres y murió. Era el año 1240. Apenas tenía 36 años. Pero había sufrido y trabajado muy intensamente, y se había ganado una gran corona para el cielo.
A San Ramón le rezan las mujeres que van a tener un hijo, para que les conceda la gracia de dar a luz sin peligro ni tormentos.
NOVENA A SAN RAMÓN NONATO
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos líbranos Señor, Dios nuestro.
Acto de contrición:
¡Señor mío, Jesucristo!
Dios y Hombre verdadero,
Creador, Padre y Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita,
y porque os amo sobre todas las cosas,
me pesa de todo corazón de haberos ofendido;
también me pesa porque podeís castigarme con las penas del infierno.
Ayudado de vuestra divina gracia
propongo firmemente nunca más pecar,
confesarme y cumplir la penitencia que me fuere impuesta. Amén.
Dios, Padre de bondad, que me has dado el inmenso beneficio de engendrar un hijo, gracias por habernos hecho partícipes de tu paternidad, dando la existencia a un nuevo ser. Ante la espera de su alumbramiento vengo a pedir tu protección, por intermedio de mi abogado San Ramón Nonato, para que este fruto de mis entrañas llegue a feliz término. Así lo espero por los méritos infinitos de nuestro Señor Jesucristo tu Hijo y los de su Santísima Madre María. Amén.
Oración a San Ramón
A ti acudo glorioso San Ramón en estos días que preceden a mi maternidad, para implorar de tu mediación la gracia de un parto feliz que, colmando mis deseos, premie mis esperanzas. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.
V. Glorioso San Ramón Nonato R. Ruega por nosotros.
Preces a la Virgen Madre
Señor, ten piedad (bis)
Cristo, ten piedad (bis)
Señor, ten piedad (bis)
Dios, Padre celestial, Ten misericordia de nosotros.
Dios, Hijo Redentor, Ten misericordia de nosotros.
Dios, Espíritu Santo, Ten misericordia de nosotros.
V. Santa María,
R. Ruega por nosotros.
V. Santa Madre de Dios,
R. Ruega por nosotros.
V. Hija del Eterno Padre,
R. Ruega por nosotros.
V. Esposa del Espíritu Santo,
R. Ruega por nosotros.
V. Madre de Jesucristo,
R. Ruega por nosotros.
V. Madre del Redentor,
R. Ruega por nosotros.
V. Madre del Salvador,
R. Ruega por nosotros.
V. Madre de la Iglesia,
R. Ruega por nosotros.
V. Madre de todos los hombres,
R. Ruega por nosotros.
V. Madre nuestra,
R. Ruega por nosotros.
V. Madre de Mercedes,
R. Ruega por nosotros.
V. Madre de nuestra esperanza,
R. Ruega por nosotros.
V. Por tu Concepción inmaculada,
R. Ruega por nosotros.
V. Por tu felicísimo nacimiento,
R. Ruega por nosotros.
V. Por tu maternidad divina,
R. Ruega por nosotros.
V. Por el nacimiento de tu Hijo,
R. Ruega por nosotros.
V. Por tu maternidad universal,
R. Ruega por nosotros.
V. Por tu amor a Jesús, tu Hijo,
R. Ruega por nosotros.
V. Por tu amor maternal hacia nosotros,
R. Ruega por nosotros.
Jesús, Hijo del Eterno Padre, perdónanos. Señor. Jesús, Hijo de María Virgen, escúchanos, Señor. Jesús, hermano nuestro, ten misericordia de nosotros.
V. Ruega por nosotros Santa Madre de Dios.
R. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo.
Oración. Dios Padre nuestro que escogiste a la Virgen María para ser la Madre de tu Hijo Jesucristo y preparaste en ella una digna morada para que tomara nuestra carne, acoge benignamente las súplicas que te dirigimos, para que, por su intercesión, atiendas favorablemente nuestra plegaria. Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor, Amén.
(Tres Padre nuestros, Ave Marías y Glorias)
Oración final:
Oh Dios, que manifestaste de modo admirable tu amor a tu siervo Ramón Nonato trayéndole a la vida de modo maravilloso y lo pusiste como protector de las que vamos a ser madres, por sus méritos e intercesiones te suplico que la nueva vida que has hecho germinar en mí venga felizmente a aumentar el número de tus hijos. Por Jesucristo nuestro Señor, Amén.
V. Piadosísima Madre de la Merced.
R. Ruega por Nosotros.
V. San Ramón Nonato.
R. Ruega por nosotros.
V. Ave María Purísima.
R. Sin pecado concebida.
ACCIÓN DE GRACIAS DESPUÉS DEL NACIMIENTO DE UN/A HIJO/A.
Hoy, Señor, vengo ante tu altar con el alma henchida de alegría y agradecimiento para darte gracias por todos los beneficios que he recibido de tu bondad y especialmente porque ha terminado felizmente nuestra espera, con el nacimiento de este hijo que nos has dado y que más que nuestro es tuyo. Por eso venimos a ofrecértelo. Tuyo es, como todos somos tuyos y, tuyos queremos seguir siendo siempre. Nos comprometemos a presentárselo a la Iglesia para que, al ser bautizado, quede consagrado a Ti. Nos comprometemos a educarle en la fe cristiana con nuestro ejemplo y con nuestro consejo. Que la ayuda maternal de María sea guía en esta misión.
Queremos darte las gracias por mediación de San Ramón Nonato, protector nuestro. Que su intercesión nos ayude también a dar a nuestro hijo una santa educación. Te lo pedimos por tu amado Hijo Jesucristo nuestro Señor que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo por los siglos de los siglos. Amén.
(Tres Padre Nuestros)